De acuerdo con un reciente informe, la gobernadora demócrata de Nuevo México, Michelle Lujan Grisham, habría destinado los fondos de los contribuyentes para comprar artículos personales como comestibles, tintorería o alcohol.
Según informó el diario Sante Fe New Mexican, los registros sobre los gastos de su oficina detallan que la gobernadora Lujan Gisrham, gastó alrededor de $13.500 dólares en un periodo de 6 meses durante el año 2020.
Respecto a los gastos en licor, las compras realizadas durante el mes de septiembre del año pasado habrían alcanzado un valor de más de 200 dólares por cinco botellas de tequila, dos de vodka, dos de vino y una botella de whiskey y otra de ginebra, También se registraron otros comestibles de lujo como filetes de atún y carne Wagyu avaluados en $6.500 dólares.
De acuerdo con el informe, Grisham se estaba ocupando en persona de la organización de reuniones para el personal en la mansión del gobernador, mientras que al mismo tiempo promulgaba información a las familias para que no se mezclaran entre sí, con el ánimo de detener la propagación del virus del PCCh (Partido Comunista de China) o coronavirus.
Según dio a conocer el portavoz de Grisham, Tripp Stelnicki a The Associated Press, la mitad de los 13.500 dólares se gastaron en la comida para los miembros del gabinete, así como el personal del gobernador durante las mencionadas reuniones.
Stelnicki afirmó que la compra de las bebidas alcohólicas avaluadas en más de 200 dólares se pensaban destinar en una cena navideña, que aparentemente se habría cancelado.
Stelnicki justificó los encuentros planificados en la gobernación diciendo: “Hay una diferencia entre invitar a alguien a su casa para el Super Bowl o el cumpleaños de alguien y tener tres o cuatro secretarios de gabinete allí para hablar sobre sus presupuestos en medio de una recesión económica sin precedentes y para averiguar lo que” voy a proponer o recomendar a la Legislatura dado el pronóstico económico cambiante”.
Por su parte el representante republicano por Nuevo México, Rod Montoya, señaló: “Realmente esa es la impresión que deja la oficina de la gobernadora, como si ella realmente se creyera más privilegiada que todos los demás en Nuevo México”.
“No sabía que la gobernadora estaba tan mal pagada que tiene que usar dinero discrecional para cosas que debería pagar ella misma”, agregó Montoya quien señaló que los legisladores tienen sus viáticos.
Mientras tanto, el líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Jim Townsend, dijo al respecto: “No es en lo que se deberían gastar los dólares de los impuestos”.
“En el momento en que la gente está sufriendo en todo el estado, usar el dinero de sus impuestos para comprar carne Wagyu tiene que ser un poco decepcionante para muchas personas”, agregó Townsend.
El gasto de dinero público se llevó a cabo pese a una ley estatal que fue promulgada en el año 2019 la cual establece nuevos límites para el uso de fondos discrecionales del gobernador.
Dicha ley fue firmada por la predecesora de Grisham, la exgobernadora republicana, Susana Martínez, de acuerdo con el New Mexican.
Anteriormente, Grisham ha estado bajo el escrutinio público luego de que en el mes de mayo del 2020, ordenara abrir una joyería para su propio beneficio, desafiando incluso sus propias órdenes para instaurar una cuarentena para negocios no esenciales, de acuerdo con el medio local KRQE News 13.