La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) designó el viernes a cinco empresas chinas como una amenaza para la seguridad nacional en virtud de una ley de 2019 destinada a proteger las redes de comunicaciones de EE. UU.
La FCC dijo que las compañías incluían a Huawei Technologies Co, ZTE Corp, Hytera Communications Corp, Hangzhou Hikvision Digital Technology Co y Dahua Technology Co.
Una ley de 2019 requiere que la FCC identifique a las empresas que producen equipos y servicios de telecomunicaciones «que se ha descubierto que representan un riesgo inaceptable para la seguridad nacional de EE. UU.».
La presidenta interina de la FCC, Jessica Rosenworcel, dijo en un comunicado: «Esta lista proporciona una guía significativa que garantizará que, a medida que se construyan redes de próxima generación en todo el país, no repitan los errores del pasado ni utilicen equipos o servicios que supongan una amenaza». a la seguridad nacional de Estados Unidos o la seguridad y protección de los estadounidenses «.
La ley de 2019 utilizó criterios de un proyecto de ley de autorización de defensa que identificó previamente a las cinco empresas chinas. En agosto de 2020, el gobierno de EE. UU. Emitió regulaciones que prohibían a las agencias comprar bienes o servicios de cualquiera de las cinco empresas chinas.
En 2019, Estados Unidos colocó a Huawei, Hikvision y otras firmas en su lista negra económica.
El año pasado, la FCC designó a Huawei y ZTE como una amenaza a la seguridad nacional para las redes de comunicaciones, una declaración que prohíbe a las empresas estadounidenses aprovechar un fondo gubernamental de $ 8.3 mil millones para comprar equipos de las empresas.
En febrero, Huawei impugnó la declaración en una petición presentada ante el Tribunal de Apelaciones del Quinto Circuito de EE. UU. Huawei se negó a comentar el viernes sobre la nueva designación de la FCC. Las otras cuatro empresas no hicieron comentarios o no pudieron ser contactadas para hacer comentarios.
En diciembre, la FCC finalizó las reglas que requieren que los operadores con equipos ZTE o Huawei «desgarren y reemplacen» ese equipo. Creó un programa de reembolso para ese esfuerzo, y los legisladores estadounidenses aprobaron en diciembre 1.900 millones de dólares para financiar el programa.
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