Jue. Mar 28th, 2024

La rectora de la Universidad de La Habana dice que hay que estudiar el marxismo incluso en las carreras que no son afines a la materia.

El mandatario cubano Miguel Díaz-Canel pidió este jueves perfeccionar la enseñanza del marxismo, el leninismo y la historia en los centros educativos cubanos, durante su intervención en el III Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC), realizado en el Palacio de Convenciones de La Habana, informó el diario estatal Granma.

«Más que todo (se trata de que) sea un paso definitivo para incorporar, de la manera más natural, el método científico que nos aporta el marxismo desde el materialismo histórico, desde el materialismo dialéctico, desde la economía política a lo cotidiano, a nuestro país, a la vida cotidiana, al análisis cotidiano que desde la Revolución tenemos que hacer de todos los procesos que estamos enfrentando en lo político, en lo económico y en lo social», agregó Díaz-Canel.

Por su parte, el miembro del Secretariado y jefe del Departamento de Atención al Sector Social del Comité Central, Jorge Luis Broche Lorenzo, afirmó que «el perfeccionamiento de la enseñanza, conocimiento y divulgación de nuestra historia, así como del marxismo-leninismo, constituye una prioridad para enfrentar los desafíos de la guerra cultural que se nos hace desde los centros de poder hegemónico del capitalismo transnacional».

Broche citó a Fidel Castro cuando afirmó que los cubanos deben hacer interpretaciones muy propias del marxismo-leninismo y a Díaz-Canel, quien expresó anteriormente que «si renunciamos al marxismo estaremos como sin visión en medio de la construcción del socialismo» y que «si no logramos que los jóvenes aprendan la historia, la sientan, la dominen, sepan encontrar respuestas a los problemas que estamos viviendo, no vamos a lograr la defensa del país ni de su Revolución».

El funcionario cuestionó los procedimientos didácticos, esquemáticos y reiterativos, los temas envejecidos, la divulgación histórica poco atractiva y pidió mejorar la política editorial al interior del sistema de Educación del país.

El jefe del Departamento de Atención al Sector Social del Comité Central del PCC también afirmó que entre las fortalezas de la enseñanza en la Isla se encuentran los legados de Fidel Castro y José Martí, así como importantes plataformas programáticas para el aprendizaje del marxismo-leninismo.

«Solo la solidez ideológica puede asegurar la supervivencia de la Revolución, y eso depende en gran medida del conocimiento que tengamos de la doctrina que defendemos», añadió.

La rectora de la Universidad de La Habana, Miriam Nicado García, dijo que es necesario lograr una cohesión del marxismo-leninismo con las carreras que no son tan afines a la materia.

Walter Baluja García, viceministro primero de Educación Superior, agregó que «conocer los preceptos del marxismo es tan importante como saber Matemáticas, como saber leer o escribir».

«Estamos hablando de aprender y de comprender la historia y de apropiarnos del marxismo-leninismo. Esta comprensión es la que realmente nos va a llevar a nuestra gente a comprender la realidad y a transformarla», añadió el funcionario.

Desde la llegada de Fidel Castro al poder las instituciones educativas cubanas han tenido un marcado carácter político, pues el dictador se encargó de implementar métodos de adoctrinamiento en los centros educacionales de la Isla, lo que llega hasta el día de hoy.

La propia viceministra de Educación Superior, Martha Mesa Valenciano, afirmó que «el que no se sienta activista de la política revolucionaria de nuestro Partido, un defensor de nuestra ideología, de nuestra moral, de nuestras convicciones políticas, debe renunciar a ser profesor universitario«.

El actual presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, expresó en 2009, cuando se desempeñaba como ministro de Educación Superior, que «el criterio de que la universidad es para los revolucionarios será patentizado«, y agregó que «la selección de los alumnos que integrarán el claustro luego de graduados tiene que ganar en calidad, no solo debe prevalecer el criterio académico, sino también sus actitudes revolucionarias y compromiso social».

Por antilope

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