La Policía Nacional de Honduras arrestó este jueves a un conductor de autobús que transportaba de manera ilegal a una treintena de indocumentados cubanos que se dirigían a Estados Unidos.
El hondureño, de 49 años, fue detenido en el municipio de Omoa, departamento de Cortés, en el Caribe del país centroamericano, según un informe de la Policía hondureña.
El hombre fue capturado por efectivos de la Unidad Transnacional de Investigación Criminal (UTIC) de la Dirección Policial de Investigaciones, el Grupo de Operaciones Especiales Tácticas y la Dirección Nacional de Servicios Policiales Fronterizos, añadió.
El supuesto traficante de personas, conocidos como «coyotes», fue remitido a un juzgado por el delito «flagrante de tráfico ilícito de personas», señaló la Policía
La alta funcionaria llegó el miércoles a Tegucigalpa, donde trató con funcionarios de Honduras y representantes de la sociedad civil las prioridades conjuntas para promover el desarrollo económico, la migración y la corrupción.
Según las autoridades, el hondureño detenido pretendía trasladar a los cubanos en el autobús hacia la frontera con Guatemala para seguir en ruta hacia Estados Unidos.
Todos los migrantes permanecen retenidos en una oficina del Instituto Nacional de Migración, donde las autoridades coordinarán su retorno a sus países.
Las autoridades hondureñas han intensificado las acciones operativas en zonas fronterizas, para combatir y contrarrestar la trata de personas y los delitos conexos.
El territorio hondureño se ha convertido en las últimas décadas en un punto de tránsito de migrantes, especialmente de cubanos y africanos, que atraviesan los países de Centroamérica para llegar a Estados Unidos.
Según cifras oficiales, más de 3.000 inmigrantes irregulares, en su mayoría cubanos, fueron detenidos en Honduras el año pasado por ingresar de manera ilegal, algunos de ellos con la intención de llegar a Estados Unidos.
El Gobierno de Honduras ha habilitado en diferentes puntos del país cuatro centros para atender a los migrantes detenidos por haber ingresado de manera irregular al país, por «puntos ciegos».