Un grupo de abogados en la ciudad de Miami está valorando demandar a la compañía American Airlines por su decisión de no permitirle abordar un vuelo a La Habana a la activista Anamely Ramos
Mientras tanto Ramos permanece “plantada” en el restaurante Versailles de la Calle Ocho y planea una protesta frente a la sede de American Airlines, según dijo a este canal.
“Estoy viendo opciones. Estamos reuniéndonos justamente para eso, para ver cómo podemos manejar el tema con American debido a todo lo que ha sucedido. Insisto en mantener la protesta en un lugar público”, dijo Ramos.
“Mi decisión sigue intacta y el reclamo sigue siendo regresar a Cuba”, añadió.
El régimen cubano no ha contestado oficialmente sobre su decisión de negarle la entrada a la activista Anamely Ramos, quien reside en la isla y estaba de visita en Miami.
Estaré hablando también de los presos políticos en Cuba. La situación de vulnerabilidad más extrema la tienen los presos”, dijo.
El periodista oficial Humberto López, que hace las veces de vocero no oficial de la Seguridad del Estado y es miembro del Comité Central del Partido Comunista justificó el destierro de Anamely Ramos citando el Decreto-Ley 302 de 2012 que faculta al gobierno para negar la entrada al territorio nacional a cualquier persona que estimule, realice o participe «en acciones hostiles contra los fundamentos políticos, económicos y sociales del Estado cubano».
En las redes sociales políticos y organizaciones que velan por los derechos humanos enviaron mensajes de apoyo a la activista desterrada.
Brian A. Nichols, subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de EEUU, quien calificó a la estrategia del régimen como «otro intento cobarde (…) de intimidar a sus propios ciudadanos y aplastar la disidencia».