Este viernes, el régimen cubano oficializó la aprobación de una nueva ley de Salud Pública que integra la eutanasia como un derecho para los ciudadanos.
Esta normativa, aprobada por unanimidad en la Asamblea Nacional del Poder Popular, reconoce el derecho a una muerte digna y permite la toma de decisiones sobre procedimientos para limitar tratamientos y esfuerzos terapéuticos, e incluso para terminar con la vida.
La eutanasia, de acuerdo con la nueva ley, será aplicada a personas con enfermedades crónicas degenerativas e irreversibles, en fase terminal o agónica, o que hayan sufrido lesiones que los sitúen en este estado.
Sin embargo, su aplicación estará supeditada a la regulación específica que deberá establecer el Ministerio de Salud, la cual aún no ha sido propuesta y dependerá de las condiciones en el país.
Alberto Roque, maestro en bioética del Instituto de Oncología y Radiobiología de La Habana, elogió la creación de un marco legal para la futura eutanasia, ya sea activa o asistida por médicos. Suaima López, una enfermera de 47 años con cáncer de recto, expresó su respaldo a la eutanasia en casos donde los pacientes no se recuperan, destacando la importancia de considerar el sufrimiento y la necesidad de una muerte digna cuando los tratamientos no son efectivos.