TikTok y su empresa matriz china ByteDance demandaron al gobierno federal estadounidense por la ley que obligaría a vender la participación accionaria de ByteDance, o de lo contrario sufrir una prohibición.
La demanda presentada el martes podría preceder a una prolongada disputa legal sobre el futuro de esa plataforma en Estados Unidos.
La compañía alega que la ley, que el presidente Joe Biden firmó como parte de un paquete de asistencia internacional de 95.000 millones de dólares, es tan “obviamente inconstitucional” que los patrocinadores de la Ley para Proteger a los Estadounidenses de Aplicaciones Controladas por Adversarios Extranjeros tratan de presentarla no como una prohibición, sino como una regulación de la propiedad de TikTok.
“El Congreso ha dado el paso sin precedentes de señalar y prohibir a TikTok: un vibrante foro en línea para el discurso y la expresión protegidos, utilizado por 170 millones de estadounidenses para crear, compartir y ver videos en internet”, dijo ByteDance en su demanda. “Por primera vez en la historia, el Congreso ha promulgado una ley que sujeta a una plataforma única e identificada por su nombre a una prohibición permanente y a escala nacional, e impide que todos los estadounidenses participen en una comunidad única en línea con más de 1.000 millones de personas en todo el mundo”.
La ley estipula que la empresa matriz de TikTok, ByteDance, debe venderla en un lapso de nueve meses. Si la venta ya está en curso, la compañía tendría tres meses más para completar el acuerdo. ByteDance ha dicho que “no tiene ningún plan de vender TikTok”. Pero incluso si quisiera venderla, tendría que contar con la aprobación de Beijing, que ya antes se opuso a una venta forzada y ha señalado su oposición en esta oportunidad.