La llamada revolución de los humildes, por los humildes y para los humildes de Fidel Castro traiciona cada vez más su promesa de igualdad entre todos en Cuba.
Ahora anuncia que podría reducir el aporte del Estado a la seguridad social de los trabajadores para financiarla, por ejemplo, con un seguro de vida que paguen los cubanos.
El anuncio de que podría disminuir el aporte estatal a la seguridad social de los ciudadanos se suma al de que por primera vez en 60 años, Cuba venderá su deuda pública a empresas y personas naturales en Bonos Soberanos.
Ese dinero, promete el régimen, se regresará en un futuro con intereses. Lo que no precisa el Ministerio de Finanzas y Precios de la isla es si, en el caso de la compra de la deuda pública, el término personas naturales incluirá a exiliados, como ocurrió con la autorización a la apertura de cuentas bancarias en dólares en Cuba.
Tanto la reducción del aporte estatal a la seguridad social, como la venta de la deuda pública a empresas y a personas naturales, son parte de un reciente paquete de medidas que, marcado por la dolarización, dice el régimen intenta estimular la golpeada economía cubana.
Entre ellas está que negocios privados puedan exportar e importar. Eso sí, por medio de 36 empresas estatales, a las que tienen que pagarles en dólares.
Autoridades del Ministerio de Finanzas y Precios y del Banco Central de Cuba también anunciaron que ahora penalizará la tradicional improductividad de la empresa estatal y que paulatinamente impondrán una política de precios única que ofrecería igualdad de condiciones tanto para empresas estatales, como negocios privados.
Fuente: Rolando Nápoles / Americateve.com